Con el objetivo de descontaminar fuentes hídricas de vertimientos de aguas residuales y mejorar la calidad de vida de los ibaguereños; El IBAL y Cortolima firmaron convenio para construir el colector de la quebrada Guadaleja.
Los recursos para este proyecto que también incluyen trabajos de estabilización del terreno, provienen de la tasa retributiva recaudada por la autoridad ambiental. Adicionalmente, el IBAL aportará los estudios y diseños que ascienden a 500 millones de pesos.
La realidad
Ibagué tiene al menos 19 fuentes superficiales contaminadas que no están canalizadas y se han convertido en basureros y/o focos de contaminación. Dichas aguas se están vertiendo a quebradas como: La Pioja, Guavinal, San Antonio, Saposa, Gavilana, Hedionda, Guadaleja, entre otras.
Así lo explicó José Alberto Girón Rojas, gerente del IBAL. “En el colector Guadaleja vamos a recuperar unos 200 metros que están a cielo abierto, y que nos están generando contaminación y problemas en la salud de los pobladores”.
El directivo también explicó que de la sobre tasa adicional del 1×1.000, Cortolima destinará unos 5 mil 700 millones de pesos en la recuperación de colectores. “Esperamos que en diciembre Cortolima adjudique el contrato. Estimamos que la construcción de este proyecto solo tarde unos 11 meses”, concluyó Girón Rojas.
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